Ver demasiadas horas de televisión al día puede tener en niños y adultos las siguientes consecuencias.
En primer lugar, puede producir en el comportamiento del individuo timidez o violencia, afectar al conocimiento y provocar un lenguaje obsceno. Además, limita la relación con la familia.
En segundo lugar, si el sitio donde vas a ver la TV no está bien iluminado, y el televisor está a menos de tres metros de distancia, puede causar fatiga visual, trastornos oculares y dolor de cabeza.
Además, si un niño ve programas violentos o ruidosos antes de dormir
éstos, le pueden provocar pesadillas o insomnio. Ver publicidad mal orientada, incita a los niños a pedir todo lo que ven.
Por último, pero no menos importante, le quita tiempo al niño o al adulto para jugar con otros niños o socializarse con más gente. Ver demasiada televisión, puede producir obesidad, depresión inmadurez, pereza y fatiga.
Sería recomendable ver la televisión una hora al día, es justo y más que suficiente.
Carla M.